El documento describe un brote de parálisis en Marruecos en 1959. Se investigaron varias teorías sobre la causa, incluida la infección y el envenenamiento. Finalmente, se descubrió que el brote fue causado por la contaminación de un aceite de cocina con orto-fosfato de cresilo, un lubricante tóxico. Esto explicó la distribución de los casos y la inmunidad de ciertos grupos. El análisis del aceite contaminado confirmó la presencia de fosfatos y cresoles tóxicos.